En 2017 se instalaron los primeros desfibriladores en diferentes dependencias de la Guardia Civil tras la firma de un convenio, pionero en su género, entre el ministerio del Interior y la Fundación España Salud. Esta cardioprotección ha permitido revertir varios episodios cardiovasculares que hubieran supuesto el fallecimiento de las personas afectadas. Esta cardioprotección se inició en las comandancias de Cataluña para extenderse posteriormente a otras CC. AA. como Andalucía, Comunidad Valenciana, etc.

El general jefe de la VII zona de la Guardia Civil, Pedro Pizarro, firma el convenio para la renovación de los equipos de cardioprotección con el presidente de La Fundación España Salud, Dr. Lluís Donoso.