Barcelona, 1 de abril.- El Consejo Científico de la Fundación España Salud ha llamado a mejorar la prevención ante problemas mentales como la depresión o el suicidio a partir de la visibilización de la enfermedad y la apuesta por hábitos de vida saludables.
El organismo, que desarrolla proyectos científicos y de divulgación para promover entre la población nuevas conductas respecto a la salud, ha incorporado a su Consejo Científico al doctor Diego Palao, médico especialista en Psiquiatría y director ejecutivo del Servicio de Salud Mental del Hospital Universitario Parc Taulí, y al doctor Gil Rodas, experto en Medicina del Deporte, responsable de esta especialidad en el Hospital Clínic y el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona y director médico del Barça Sport Innovation Hub.
Palao ha lamentado en su intervención en Barcelona ante el consejo que el suicidio sea “una muerte silenciada”: “En España, el suicidio causa el doble de muertes que los accidentes de tráfico y ayudaría a mejorar que la población lo reconozca como un problema de salud”, ha señalado.
La depresión, según explicó, “es la enfermedad que más años de vida vividos con discapacidad está provocando y, sin embargo, tiene un tratamiento muy eficaz”.
El 70 por ciento de los casos se podría tratar, “si bien la mitad de los pacientes depresivos no reciben el tratamiento adecuado pese a que estos tratamientos son accesibles”. La causa, el desconocimiento: “Hay un conocimiento social de las enfermedades mentales bastante bajo, que hace que los pacientes con depresión se autorreconozcan mal, se diagnostiquen peor y reciban tratamiento tarde y mal”.
La prevención del trastorno mental en jóvenes y la rápida intervención cuando se detecten factores de riesgo “son estrategias ganadoras para prevenir suicidios”, dado que “la mayoría de los trastornos mentales que vemos en adultos comienzan antes de los 15 años y, además, hay factores de riesgo que sabemos asociados a la aparición del trastorno mental, como el estrés, el abuso, el bullying y el consumo de drogas”.
Frente al efecto Werther -teoría según la cual la exposición a noticias sobre suicidios tiene un impacto negativo y de contagio-, el doctor Diego Palao alude al “efecto Papageno”: “Si los medios de comunicación informan de forma correcta y no de manera truculenta, sin presentar el suicidio como una muerte heroica o romántica, ni como la consecuencia de un padecimiento imposible, sino como un fenómeno asociado a la enfermedad mental , que se puede prevenir y tiene tratamiento, pueden ayudar a prevenir imitaciones”.
MÁS EJERCICIO FÍSICO
Por su parte, el doctor Gil Rodas ha apuntado que “el ejercicio físico necesita una prescripción, una dosis, que debe ser administrada por un médico del deporte”. Muchas enfermedades crónicas mejorarían con la prescripción de una determinada actividad física por parte de un médico del deporte, pero esta especialidad es poco conocida y poco reconocida, asociándose casi exclusivamente a las lesiones de los jugadores profesionales, señala la Fundación en un comunicado.
“Normalmente salimos en los medios cuando hay temas de dopaje, cuando fallece un jugador en un campo de fútbol o cuando un jugador tiene una lesión muscular y no puede jugar la Champions”, admitió. Por ello, se mostró muy satisfecho del proyecto desarrollado por el Clínic y el Hospital Sant Joan de Déu “para llevar la Medicina del Deporte al hospital y poder así proyectar sobre las enfermedades crónicas todo lo que sabemos sobre la prescripción de ejercicio físico”.
“La actividad física -explicó- es una pastilla terapéutica, pero en el mundo cada vez se hace menos ejercicio físico, menos deporte… Vamos a tener una población envejecida, con enfermedades crónicas, y la mejor pastilla no es el ibuprofeno, sino el ejercicio físico”. Y el ejercicio físico “necesita una prescripción, una dosis, que debe ser recomendada por un médico del deporte”.
Noticia original en El Mundo