Los doctores Ramón Estruch, Antonio Martínez-Peinado y Antoni Castells (de izquierda a derecha), durante el coloquio posterior a sus respectivas conferencias
  • La jornada “Dieta mediterránea, claves científicas de una herencia cultural”, organizada por la Sociedad de Diagnóstico Analiza, reunió en Barcelona a prestigiosos especialistas, que destacaron los incontables beneficios para la salud de nuestra cultura gastronómica
  • El Dr. Antoni Castells, director Médico del Hospital Clínic de Barcelona y miembro de las Fundaciones Barcelona y España Salud, subrayó que determinados productos básicos de nuestra alimentación, así como los programas de prevención, “nos pueden proteger del cáncer de colon”

Barcelona, 5 de octubre de 2019. Barcelona acogió por segundo año la “Jornada Científica Analiza” organizada por la reconocida sociedad de diagnóstico, con la colaboración de Cerba, Asisa y las Fundaciones Barcelona y España Salud. En esta edición, bajo el título “Dieta mediterránea, claves científicas de una herencia cultural”, los expertos centraron el foco en los innumerables beneficios que nos aportan productos básicos de nuestra cultura gastronómica. Una dieta, la mediterránea, que no sólo protege frente a las enfermedades cardiovasculares, sino que previene determinados tipos de cáncer y, además, reduce los niveles de estrés y ansiedad ya que, la costumbre de compartir mesa con familia y amigos, favorece la socialización.

La Jornada Científica Analiza congregó en el Hotel El Palace de Barcelona a numerosos profesionales interesados en conocer las últimas novedades sobre los beneficios de la dieta mediterránea

Además de recordar que la dieta mediterránea está detrás de nuestra alta esperanza de vida -España figura en todos los estudios entre los tres primeros países del mundo con mayor longevidad y será el primero en 2040-, Antonio Ballesta, director médico de Analiza hizo hincapié en tres hábitos que potencian los efectos beneficiosos de nuestra alimentación: “Hay que comer la mitad, andar el doble y reír el triple”.

El Dr. Castells explicó que el factor ambiental es “muy poderoso” en el desarrollo del cáncer de colon

La primera conferencia de la jornada -moderada por el Dr. Bartolomé Beltrán, director de Prevención y SS.MM. Atresmedia- corrió a cargo del Dr. Antoni Castells, prestigioso gastroenterólogo, director Médico del Hospital Clínic de Barcelona, coordinador del Programa de Detección Precoz del Cáncer Colorrectal de Barcelona y miembro fundador de las Fundaciones Barcelona y España Salud. Comprometido desde hace años con la prevención del cáncer de colon, explicó que los tumores colorrectales son los que tienen mayor incidencia en España si tenemos en cuenta ambos sexos y es más frecuente a partir de los 50 años. “Estamos hablando de una enfermedad lenta en cuyo desarrollo el factor ambiental es muy poderoso, a excepción de un pequeño grupo de carácter hereditario”, subrayó.

Una de las imágenes que utilizó el doctor Castells para ilustrar su conferencia

De ahí la importancia de participar en los programas de cribado de cáncer de colon y de adoptar unos hábitos de vida saludables. Alimentos básicos de la dieta mediterránea, entre los que citó la fibra, las frutas y vegetales, el pescado, la leche, los productos lácteos, el aceite de oliva y los frutos secos “nos pueden proteger del cáncer de colon”. Pero el consumo de estos alimentos debe ir acompañado de “un índice de masa corporal y un peso adecuado, de la práctica de ejercicio físico y de la erradicación del tabaco y el alcohol”.

El doctor Castells destacó también el papel que juega la microbiota en nuestra salud y cómo la alimentación es fundamental para que las bacterias que campan por los intestinos se mantengan en equilibrio. “La microbiota -recalcó- puede incidir en el desarrollo de determinadas enfermedades si está alterada”. De hecho, el estudio de las bacterias que viven en el intestino es una de las vías de investigación para la detección precoz del cáncer de colon.

Tras el Dr. Castells tomó la palabra el Dr. Antonio Martínez-Peinado, responsable de Genética Molecular en el Hospital Reina Sofía de Córdoba, quien centró su intervención en la “nutrigenómica”, disciplina que estudia cómo se relaciona la dieta con el genoma y que permite entender por qué cada individuo responde de distinta manera a determinados nutrientes. La nutrigenómica permite hacer un diagnóstico y establecer un tratamiento nutricional basado en el genotipo individual.

El Dr. Ramón Estruch enumeró los principales alimentos de la dieta mediterránea y los beneficios que proporcionan

Cerró la sesión el Dr. Ramón Estruch, del servicio de Medicina Interna del Hospital Clínic de Barcelona. Sus investigaciones sobre los efectos de la dieta mediterránea en las enfermedades cardiovasculares o el cáncer se han publicado en prestigiosas revistas médicas internacionales. El doctor Estruch mostró su preocupación por el retroceso que empieza a experimentar la dieta mediterránea. “Algunos estudios nos indican que estamos perdiendo nuestra herencia, que nos están colando patrones anglosajones y, sin darnos cuenta, comemos cada vez peor”, advirtió.

En este sentido, sostuvo que nunca es tarde para empezar a comer bien y que la alimentación saludable “no es un problema de cantidad de calorías, sino de la calidad de dichas calorías”. Investigación tras investigación, los expertos se muestran cada vez más “sorprendidos” del efecto beneficioso que tiene nuestra dieta para proteger de las enfermedades cardiovasculares.

Sustituir el aceite de oliva por el virgen extra si es posible; consumir fibra preferentemente integral; incorporar los frutos secos a las comidas en vez de consumirlos como tentempié; comer abundante fruta y verdura; reducir el consumo de carnes, pero sin eliminarlas; disminuir también la ingesta de sal; beber con moderación vino y cerveza y eliminar la bollería industrial, el tabaco y el alcohol son algunos de los consejos que el Dr. Estuch dio a los asistentes a las jornadas.

También precisó que la dieta mediterránea mejora si se incorporan determinados alimentos que no son propios de la ribera mediterránea ni del paralelo 40 pero que tienen efectos beneficiosos para la salud. Se trata, por ejemplo, de alimentos como el cacao puro, el café y el té, procedentes de climas tropicales.

El responsable del Consejo Económico de las Fundaciones Barcelona y España Salud, Jordi Ramentol (izquierda), y el presidente de ambas fundaciones, Dr. Lluís Donoso, asistieron a las jornadas