Es una iniciativa solidaria impulsada por ESTEVE con la participación de Fundación España Salud.

El objetivo es llegar a 100.000 Km en cuatro meses e instalar 30 desfibriladores, reduciendo los 40.000 fallecimientos que cada año se producen por muerte súbita en España

Todo el mundo puede donar los kilómetros recorridos andando, corriendo, nadando o en bicicleta en www.latidosquesuman.com y mediante cualquiera de estas aplicaciones: Google FIT, Runtastgic, Fitbit, Apple Salud, RunKeeper o Dailymile

En la primera edición de la campaña, dirigida únicamente a médicos y farmacéuticos, se donaron 70.000 Km y 20 desfibriladores que próximamente se instalarán, en 9 localidades

30 de septiembre de 2017.- La carrera solidaria y virtual ≠latidosquesuman inicia su segunda edición, ahora abierta a cualquiera que desee participar. El objetivo del proyecto, impulsado por ESTEVE con la participación de Fundación España Salud, es ayudar a salvar vidas al mismo tiempo que se promueven hábitos de vida saludables. La meta es llegar a los 100.000 kilómetros recorridos andando, corriendo, nadando o en bicicleta en los próximos cuatro meses para instalar hasta 30 nuevos desfibriladores en todo el territorio nacional.

“Latidos que suman” quiere que más corazones sigan latiendo. “La iniciativa nace desde el Área Cardiovascular de ESTEVE y de nuestro firme compromiso con la salud y la calidad de vida. Se trata de facilitar que los profesionales sanitarios fomenten hábitos de vida cardiosaludables entre sus pacientes y vincular este reto a aumentar el número de desfibriladores instalados en nuestro país”, explica Mireia Marimon, Responsable de RSC de ESTEVE. Y es que si al lado de cada extintor hubiera un desfibrilador y personal con conocimientos mínimos de reanimación, podrían salvarse más de 4.500 vidas al año1. De hecho, son el tratamiento más eficaz para evitar la muerte súbita, que es la aparición repentina de e inesperada de una parada cardíaca.

Sin embargo, España está a la cola en número de desfibriladores instalados respecto a la UE: “alrededor de 10.000 frente a los 100.000 en Francia, los 80.000 en Alemania o los 50.000 en Reino Unido1. Además, sólo siete comunidades autónomas regulan la instalación de estos dispositivos en espacios públicos: Andalucía, Asturias, Cataluña, Canarias, Euskadi, Madrid y Castilla Leon”, afirma el Dr. Josep Brugada, presidente de la Fundación España Salud y considerado una de las máximas autoridades en muerte súbita.

En la primera edición, dirigida sólo a médicos y farmacéuticos, se recorrieron 70.000 kilómetros y se están instalando entre septiembre y octubre 20 desfibriladores en nueve localidades españolas: Cáceres, Badajoz, Pamplona, Gijón, Oviedo, Utrera, Guadalema de los Quinteros, Los Palacios (Trobal) y San Sebastián.

¿Cómo participar para salvar vidas?

Para sumarse a la iniciativa y donar los kilómetros recorridos, basta con realizar tres sencillos pasos. Primero, entrar en www.latidosquesuman.com y registrarse. Segundo, rellenar los datos y poner una contraseña fácil de recordar. Y, tercero y último, vincular un dispositivo o una app que registre la actividad.

Si ya se utiliza alguna de estas aplicaciones para controlar la actividad física: Google FIT, Runtastgic, Fitbit, Apple Salud, RunKeeper o Dailymile, basta con seleccionar y pulsar “Donar Kms” para acceder a ≠latidosquesuman y poder hacer la donación. En caso contrario, cualquiera de estas app puede descargarse de forma totalmente gratuita desde App Store o Google Play, vinculándola a esta iniciativa solidaria.

Un desfibrilador, la diferencia entre la vida y la muerte

La muerte súbita (MS) es un fallecimiento natural inesperado debido a causas cardíacas que se caracteriza por la pérdida de conocimiento en la primera hora desde el inicio de los primeros síntomas. “En España, causa entre 40.000 y 45.000 muertes al año, 18 veces más que los accidentes de circulación. Sólo en 2015, hubo más de 70.000 ingresos hospitalarios debidos a un episodio de muerte súbita en nuestro país”.

La enfermedad coronaria es la responsable del 80% de las paradas cardíacas1. Pero la MS puede producirse en personas de cualquier edad, aparentemente sanas y sin antecedentes de enfermedad cardíaca e, incluso, en atletas de alto rendimiento, como ha sucedido en el caso de varios jugadores de fútbol. “Es muy difícil de prever. La principal dificultad es identificar a pacientes con alto riesgo. Y, además, las probabilidades de sobrevivir a un episodio de MS se reducen en un 10% por cada minuto que pasa”.

Por todo ello, los expertos insisten en la necesidad de aumentar el número de desfibriladores, especialmente en lugares con alta afluencia de población, como aeropuertos, estaciones de tren, centros comerciales, mercados, instalaciones deportivas. “Es importante controlar los factores de riesgo cardiovascular, como la presión arterial, el tabaquismo, el sobrepeso y la obesidad o la diabetes, entre otros. Pero también es crucial aumentar el número de desfibriladores de acceso público. Para una persona que padezca un episodio de este tipo, un minuto puede suponer la diferencia entre la vida y la muerte”.

En 2012, el Parlamento Europeo estableció la MS como un problema prioritario de salud pública en la UE. Además del consiguiente coste de vidas, cabe sumarle el coste para el sistema sanitario –que es superior a los 326 millones de euros anuales en España.

Presentación proyecto en Utrera