Según adelantó la ministra de Sanidad el pasado 17 de diciembre en la reunión científica de la Fundación España Salud.

En un plazo de tres años, más de 3.500 productos alimentarios llegarán a las mesas y estanterías de los comercios con el 10% menos de media de contenido de sal, azúcares añadidos y grasas saturadas, según el plan de colaboración con los sectores de la industria alimentaria y la distribución y más de 500 empresas que presentó la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, y ya avanzó el pasado 17 de septiembre en el transcurso de la reunión del consejo médico y empresarial de la fundación España Salud celebrada en Caves Codorniu.

La medida tendrá un gran impacto en la cesta de la compra, ya que los productos incluidos suponen el 44,5% de la energía total del consumo habitual. Los azúcares añadidos se reducirán el 10% en la mayoría de productos lácteos, los derivados cárnicos, los néctares de fruta, las salsas de tomate, las bebidas refrescantes de lima-limón y los cereales de desayuno chocolateados; el 18% en las mayonesas; del 3,5% al 7,4% en los productos lácteos considerados como “de indulgencia” (flan, natillas, arroz con leche), y el 5% en la bollería, pastelerías, helados de hielo, pan envasado y salsas como el popular kétchup.